Carlos Mata, Técnico Mecánico de Mantenimiento
Industrial
“La solución está en los trabajadores y no
en la burocracia que el gobierno ha
creado”
Cristóbal Pierluissi H.
Jose Luis Alcocer
Ha estado presente
en las luchas reivindicativas de sus compañeros trabajadores siderúrgicos,
sobre manera en los últimos ocho años.
Su nombre descolló de manera protagónica como uno de los líderes del reciente
paro en Sidor en la Gerencia de Barra y Alambrón, en demanda de la interpretación correcta y cumplimiento
de unas de las cláusulas económicas de la convención colectiva, como son la
referida a Hoja de Cálculo y al pago correcto de las utilidades.
Hablamos de Carlos
Mata, quien nos cuenta que ingresó a Sidor en el año 1988, oriundo de Carúpano,
con una pasantía por Güiria, Estado
Sucre, llegó a tierras Guayanesas siendo un niño. Aquí culminó parte de la etapa de educación primaria y la
educación secundaria.
Testigo de excepción
“Ingresé a Sidor
a través del convenio Sidor-Ince, realizando el curso como Mecánico Industrial. Luego de culminar
la capacitación, me envían a laborar en los trenes de laminación 500, 800 y
1.100. Un año más tarde, en 1989 se inicia
el traumático proceso de reconversión
industrial, cuyo objetivo fue orientar
la viabilidad de la empresa en una economía global”, relata nuestro
entrevistado.
Carlos Mata, fue testigo de excepción en ese proceso, al cual lo recuerda
con mucha nostalgia porque en esos trenes convencionales dio sus primeros pasos
en el mundo siderúrgico. El 4 de octubre de 1990 se realizó la última colada en
el Horno N° 1 de la Acería Siemens-Martin. La producción histórica de esa
acería llegó a 17.300.000 toneladas. Catorce días después cierran la Planta de Arrabio,
luego de 29 años de funcionamiento.
-¿Qué alegaron?
-Las justificaciones fueron económicas y de inversión. En esa oportunidad
se pasó de 18.500 trabajadores a 12.400 trabajadores, algunos fueron al
programa de reinserción laboral, otros quedaron fuera de la empresa- recuerda
el matancero.
Mecánico por
vocación
-¿Cuándo
comenzaste a tener información de la Siderúrgica del Orinoco?
-Bueno, cuando yo llegué a Guayana, ya estaba un familiar mío que es
ingeniero metalúrgico e hizo pasantias en Sidor, por lo tanto, ya tenía
noticias de lo que ocurría en la siderúrgica.
-Con respecto a
tu vocación profesional. ¿Cómo abordaste
ese tema?
-Siempre pensé desde pequeño que quería ser mecánico automotriz y terminé
siendo mecánico de mantenimiento industrial, mi capacitación fue en el Ince, donde
hice mi pasantía de año y medio como aprendiz Ince en los trenes 500, 800 y 1.100, allí conocí al ingeniero Leopoldo
Sanz en el departamento de Torneria. Luego como mecánico, he sido Mecánico Inicial,
Intermedio, Superior, hasta el presente que soy Técnico Mecánico de Mantenimiento
Industrial con todas las de la ley.
La
gran escuela
-¿Qué te dice
eso de Sidor?
-Sin dudas, lo que mucha gente
sostiene, que esta planta ha sido y sigue siendo, aún con todas las dificultades
y problemas que atraviesa, la gran escuela, la gran universidad del trabajo. Aquí nos hemos formado varias generaciones
de trabajadores, de sidoristas, que con orgullo proclamamos nuestra condición
de ser integrantes de la nómina de esta empresa de todos los venezolanos.
-Después del
cierre de los trenes 500, 800 y 1100, ¿a dónde te enviaron?
-Luego fui al tren de Barras y Alambrón, mucho más moderno porque esas
plantas forman parte del complejo industrial del Plan IV que se construyó en la
década de los setenta.
La cabilla,
estratégica
-¿Cuáles
productos fabrican en las plantas de Barras y Alambrón?
-Allí se fabrican las cabillas, un producto destinado a la construcción y
que tienen una importancia estratégica para el gobierno nacional por ser uno de
los insumos que más se utilizan en la gran misión vivienda.
“También se producen
en la planta de Alambrón, alambre en rollos destinado a la trefilación en frío
en distintos diámetros para la
fabricación de clavos, alambres galvanizados, alambre para refuerzo
estructural, de púas y otros”, añade.
-¿Cómo evalúas las
tres fases de Sidor que te ha tocado vivir, primero como empresa del estado,
luego privatizada y ahora de vuelta al estado?
-Yo hago ese enfoque desde el punto de vista laboral.
-¿Cómo es eso?
-Bueno, que patrón es patrón y el patrón sea privado o
público siempre estará tratando de favorecerse
en contra de los beneficios y derechos de los trabajadores. Debo
reconocer que en el tiempo en que Ternium gerenciaba Sidor se hicieron muchas
mejoras tecnológicas y ahora vemos como la producción ha decaído.
“Que busque a los trabajadores…”
-Si tuvieras que
darle un mensaje al Presidente de Sidor. ¿Qué le dirías?
-Al General
Sarmiento le diría que la clave para sacar a Sidor adelante está en los propios
sidoristas, que se acerque a las bases, que converse con quienes sabemos como
se bate el acero, puedo decir con toda responsabilidad que la solución está en
los trabajadores y no en la burocracia que el mismo gobierno ha creado.
Así concluye nuestro diálogo con Carlos Mata, un venezolano
convencido de la capacidad de los sidoristas para salir adelante.
-------------
No hay comentarios.:
Publicar un comentario